Volcán Acatenango – campamento en las terrazas
Tiempo total: 1 días con 9:58:20 hrs
El día sábado 17 de noviembre fuimos a acampar en el Volcán de Acatenango; noviembre y diciembre es de las mejores épocas aquí en Guatemala debido a que encontrarás una noche muy despejada llena de estrellas, inclusive observarás parte de la vía láctea.
Ese día se estaba llevando a cabo la ultra maratón 72k, la cual inicia desde Antigua, los corredores llegan a Santa María de Jesus y ascienden el Volcán de Agua, descienden por San Juan Alotenango e inician el ascenso hacia el Volcán de Fuego, al hacer cumbre en el camellón van hacia el cráter mayor de Acatenango atravesando la orqueta. Luego, descienden hacia la aldea La Soledad y se dirigen de nuevo a Antigua Guatemala. Una maratón muy exigente.
Costo de acampar en las terrazas: Q25 por persona
Cuando llegamos al mirador de fuego, nos sentíamos libres por estar en territorio propiedad de la República de Guatemala. Luego de un momento, un extraño se nos acerco y nos quería cobrar Q25 por persona, lo primero que le preguntamos fue ¿este terreno es de tu propiedad?
Este tipo extraño, nos explicó que él es parte de una cooperativa de la Aldea La Soledad, un grupo de 30 guías se habían unido para construir esa área, trabajaron y le dan mantenimiento al camino desde la Y. Dicho de esta manera tienen razón.
Algo que también explicó fue que el cobro de Q25 en la garita de la entrada del volcán está destinado a la alcaldía de Acatenango y no a la aldea La Soledad, así también mencionó que es ¿ilegal? debido a que el actual alcalde no apoya a la aldea, todo se lo roban.
Al final concluimos que tienen razón; yo guardé mi cámara (lo empecé a grabar porque me dio desconfianza), mis palabras fueron “ok, vamos a esperar a que vengan mis otros compañeros (hacían falta 2), vamos a buscar donde acampar y si decidimos quedarnos en esta área, te vamos a decir”.
Como todo buen trabajador de las tierras, no entendió.
Cuando estábamos de regreso en el parqueo de La Soledad, se nos acercó con el presidente de la cooperativa. Ellos son personas trabajadoras, así que tuvimos que escuchar toda su explicación de nuevo, pero totalmente por aparte, es necesario mencionar que hay personas bélicas con las que no puedes razonar.
Después de lo sucedido recordé que a unos compañeros de trabajo, al no querer pagarle a ningún guía cuando ascendieron el Volcán de Atitlán, durante el regreso se les acercaron unos ladrones con armas y gorros pasamontaña, les robaron todo. Lo curioso de este caso fue que las voces de los ladrones eran las mismas que la de los guías a los cuales no quisieron contratar.
Modo zombi
Ascender un volcán en modo zombi es cuando una persona siente excesiva fatiga, no puede avanzar tres pasos porque se queda quieto, viendo hacia el suelo, no quiere ver hacia arriba porque le preocupa ver cuánto le falta para llegar.
Los ascensos a los volcanes reflejan que tan bien esta tu salud, es decir, no importa si vas al gimnasio, si haces zumba (hahaja), en un volcán se verá reflejado que tan bien comes y la resistencia que tienes.
Supongo que es por eso que a mí en lo personal, no me gusta ascender con grupos de exploración. Por ejemplo, los ascensos desde San Juan Alotenango hacia el Volcán de Fuego o Agua, cuando en buenas condiciones los subes en 6 horas, con un zombi en el grupo los subes en 12, 13 horas e inclusive 15.